CEREMONIA DE GRADUACIÓN UNDÉCIMO (ATHMOS) 2018
Por: Valentina Rueda
Fecha: 12 de Diciembre de 2018
Buen día familia Mercedaria, reciban un cordial saludo de paz y bien. Hoy es un día de gran dicha y regocijo en el que nos congregamos para celebrar la culminación de la primera etapa de nuestra formación académica, la cual se debe al esfuerzo y dedicación de muchas personas, héroes que velaron por nuestra formación, por corregirnos y hacernos cada día mejores, por esto y mucho más son merecedores de nuestra eterna gratitud y admiración.
En esta fecha tan especial quiero dar gracias a Dios por iluminar y bendecir nuestros senderos hacia el éxito, a los directivos, quienes con su apoyo y guía le dieron sentido a nuestro paso por la institución; a los profesores, porque no se limitaron al momento de enseñarnos exclusivamente el ámbito académico sino que fueron maestros de vida y forjadores de camino; a nuestros padres, pues son hombres y mujeres valientes que no solo se preocuparon por nuestra educación sino que desde casa nos fueron instruyendo en valores y sentido de pertenencia; a nuestros amigos, ya que nos impulsaron e inspiraron a dar lo mejor de nosotras mismas, y por último MIL GRACIAS promoción Athmos porque además de compañeras de curso y amigas de clase, se convirtieron en una gran familia que me enseñó a creer en la confianza y en el amor.
Hoy, es un honor para mí tener en frente a tan maravillosos seres, pues con su magia dejaron huella en los corredores, pasillos, salones y en los corazones de todas las personas que conforman la comunidad mercedaria. Cada una con su don especial hizo que estos 11 y para algunas 13 años estuviesen llenos de recuerdos, aventuras y alegrías, entre nosotras sabemos quienes aportaron las risas, el entusiasmo, los saberes, la música, el deporte y el liderazgo. Piezas de este magnífico rompecabezas que brilló con luz propia cada día.
Hoy, dando una mirada al pasado, recordamos que llegamos siendo niñas pequeñas, curiosas y algo rebeldes, actitud que se hacía presente en las divertidas salidas pedagógicas donde el destino nos llevaba a untarnos las manos de petróleo, bañarnos con chorros de aguas desconocidas, ver cascadas, perder zapatos por el río y volver los buses epicentros de karaoke y recreación con las canciones de Rebelde a todo volumen. Dentro del colegio nos disponíamos a jugar hasta el cansancio en la casita de muñecas, en el parque de los almendros, dramatizando innumerables programas de televisión, tal vez siendo los power rangers, o inclusive inventando historias terroríficas que tomarían lugar en el parque, por lo que estábamos felices y siempre listas para adquirir conocimiento esencial para nuestro futuro.
Ahora nos despedimos, cambiamos el uniforme por togas y birretes, pues nos hemos convertido en grandes mujeres con grandes cualidades, como lo son la responsabilidad, el compromiso, la solidaridad y la unión; valores que implementaremos con orgullo a la hora de salvar alguna vida, defender a quién lo necesita, enseñar al prójimo, cambiar la economía del país, desarrollar experimentos científicos o siendo la mejor deportista, bailarina o cantante de todos los tiempos.
“Aunque nadie ha podido regresar atrás y hacer un nuevo comienzo, cualquiera puede recomenzar ahora y hacer un nuevo final “Jonathan García-Allen
Quisiera finalizar haciendo una invitación a todos los asistentes.
Directivos, no desfallezcan a la hora de mantener en alto el renombre del Colegio La Merced: Maestros, no dejen de luchar por la educación y por el fomento de los valores. Padres, amen, corrijan y comprendan a sus hijas, Compañeras graduandas ¿recuerdan cuando solíamos llamarnos Ohanna?, ¿Cuando repetíamos sin cesar “Ohanna significa familia y tu familia nunca te abandona ni te olvida”? llegó el momento de poner esto en práctica, de recordar que más que amigas somos hermanas, de saber que siempre estaremos para apoyarnos y que así la vida nos lleve por diferentes rumbos, en algún lugar del mundo estará un ser mágico dispuesto a ayudarnos sacándonos una sonrisa. Athmos: no permitan que nadie se interponga en la realización de sus sueños, perdonen y luchen, crezcan hasta el punto más alto, pues estoy segura que conocí gente increíble y capaz, gente que como lo llevo haciendo desde hace años y hasta el día de hoy admiro.Ustedes son la razón por la que me siento orgullosa de decir que soy Mercedaria.
Que nuestra esencia sea esa magia que nos una por siempre.
Gracias.